Reconozco que este autor nunca me ha entusiasmado, he leído unos cuantos de sus libros y me cuestan, aunque no dejo de intentarlo de vez en cuando. Había leído este libro hacía años pero apenas lo recordaba. Lo he vuelto a leer con la intención de leer toda la trilogía. Pero no me ha gustado ni me ha parecido nada divertido, creo que sencillamente no es mi estilo de humor. El protagonista, del que desconocemos nombre o edad, lleva 5 años internado en un manicomio cuando recibe una propuesta para salir de allí, si colabora, gracias a su facilidad de maniobra en los bajos fondos y en el mundo delictivo, en la investigación de la desaparición de una niña de un colegio de monjas. A partir de allí saldrá del centro e iniciará sus pesquisas. A parte de que no me guste nada el repelente protagonista-narrador ni el lenguaje tan rimbombante que utiliza, en mi opinión trama y desenlace hacen agua por todas partes, hay poca coherencia y demasiado absurdo. Es, y supongo que pretende ser, un disparate, pero a mí no me ha convencido. Es solo mi opinión, pues sé que hay grandes fans del autor. Lo he terminado porque es corto, y aún así me he planteado varias veces abandonarlo. No sé si lo intentaré con “El laberinto de las aceitunas”.
hace 8 años