Una novela oportunista y sobrevalorada. Ciertos sectores separatistas catalanes están encantados con ella porque de una forma un tanto maniquea justifica sus tesis. A nivel histórico, un amigo catalán que es profesor de historia de la Universidad de Barcelona, me comenta que falsea y manipula algunos datos, muchos otros son ciertos. Por todo ello creo que es mala a pesar de su éxito de ventas, no tanto por su valor literario, que no es mucho, sino por ahondar en el planteamiento de la imposibilidad de entendimiento entre la "España castellana" y por ende según el autor militarista, intransigente e improductiva y la "Catalunya-Estat" benévola, dialogante,y productiva. Creo que tiene, especialmente en el escenario político actual catalán, una gran intencionalidad política, valga la redundancia, y no aboga hacia el entendimiento de los pueblos de España.
Creo que desde Cataluña se debe hacer un esfuerzo de entendimiento con el resto de España, pero desde el resto de España se debe hacer un esfuerzo por entender a Catalunya, y Victus no sigue ese camino, más bien todo lo contrario.
P.E. Excusen la excesiva politización de mi comentario, pero en éste caso no lo he podido evitar, si molesta a alguien le pido disculpas de antemano.
hace 9 años
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