Desde manipulación genética que nos hace polvo joviano hasta hormigas altamente civilizadas y perros que hablan. Toda fantasía surrealista de Simak parte de la capacidad de desarrollo que tiene una sociedad, comunidad, especie o individuo. En 8 cortos capítulos (inciertamente relacionados), el autor nos relata cómo cree que funciona la evolución, cómo nos puede afectar y qué significa la evolución a sus ojos. Las pequeñas historias no profundizarán más que en mostrarte como algo se desarrolla y por qué, por lo que es misión del lector ir armando las piezas para tener la amplia visión sobre el tema que Clifford sugiere. Si no lo hace, esta simplemente será una historia sin mucho sentido, pero no por ello con muchos escenarios espectaculares y nunca pensados, conceptos que te vuelan la cabeza y vueltas de tuerca que le dan un significado especial a los temas que abarca. Si hubiese una razón para recomendar este libro, esta sería lo fresco que se siente cada capitulo una vez empezado. Todos los escenarios son totalmente distintos y cuesta creer que se trate siempre de la misma ficción, que toda narración obre con la misma lógica que las otras.

¿Y si en un futuro cercano lejano, las hormigas se convierten en los amos de la tierra? Desde esta pregunta Clifford Simak comienza a contar las leyendas de los hombres antes de abandonar el planeta azul. Pero atención que estas historias son relatadas por perros que saben hablar gracias a los terrícolas quienes viven en Júpiter y recuerdan su antigua vida terrestre. No es necesario ver una película con efectos especiales, con solo darle al "on" y leer esta extraordinaria novela de ciencia ficción, se logran imágenes galácticas que te volarán la cabeza. Vamos... un "viaje textual" de aquellos. He aquí un escritor con muchísima imaginación y delirio científico, con un planteo sociológico muy original. Si tienes ganas de soñar un futuro donde las posibilidades superen los lógicos límites gravitatorios del presente. Hay que leer este clásico y dejarse llevar por su lectura prodigiosa.