Durante los veintiséis años del pontificado del polaco Karol Wojtyla (más conocido como Juan Pablo II), la población mundial aumentó en dos mil millones. A una cifra tal había llegado nuestra especie en 1930, después de millones de años de ex...
—Pero dígame una cosa, maestro: ¿cuando usted dice «yo» en sus novelas es usted? —No, es un invento mío. Como yo. Yo también me inventé. Y aquí me tienen en estas bancas de viejos desocupados de este parque de mendigos y prostitutos hablando con el viento o con quien sea y al borde del negro abism...
La puta de Babilonia, como llamaban los albigenses a la Iglesia de Roma segœn la expresión del Apocalipsis, saca a la luz el voluminoso sumario de los crímenes perpetrados en nombre de Cristo por su Iglesia desde el año 323 en que, apoyada por el emperador Constantino, pasó de víctima a victimaria....
Me pasé la infancia y la juventud en misa o leyendo novelas, y tantas oí y leí que perdí la fe: en Dios, cosa que para los efectos de la literatura poco importa, y en el novelista de tercera persona que sí. En este negocio el que no es poeta o novelista de tercera persona se quedó colgado del trapec...
«El ser humano es una bestia bípeda entrenada durante cuatro millones de años de evolución (contados desde que bajó del árbol) para mentir de las formas más sutiles, de las cuales hoy por hoy las más prestigiosas son la palabra y las ecuaciones». Fernando Vallejo, que ya en otro libro de ensayos se...
«Un libro alucinante. Un desafío a la vez que una bofetada. Vallejo se desgarra al escribir, y nos desgarra y nos alucina.» (Alberto Aguirre, El Mundo) «La más violenta andanada que se ha escrito contra Colombia pero a la vez un emocionado grito de independencia y rebeldía y, ¿por qué no decirlo?, d...
Fernando Vallejo nos narra las aventuras de su hermano alcalde de Támesis, un pueblo perdido en las montañas de Colombia que lleva el nombre del río de Londres y donde, cosa curiosa, todos quieren ser felices a toda costa. Pero no lo logran. Y es que la felicidad de los unos choca con la felicidad d...
«Trémulo empecé a leer el manuscrito de Shafick, y no sólo eran sus recuerdos de Barba Jacob sino el intento de su biografía. Intento, pues Barba Jacob -como antes a Juan Bautista Jaramillo Meza, Manuel José Jaramillo, Lino Gil Jaramillo y Víctor Amaya González, que también fueros sus amigos- tambié...