Esta biografía revela tanto que resulta sorprendente, afirmaciones sobre los Stones que harían que a mas de uno le explotara la cabeza, con un estilo de vida extremo, excesos en todos los sentidos inimaginables, estos “chicos malos” del mundo de la música arrasaban con todo en la vida saliendo de rositas de todos los entuertos. Flaco favor les hace también la autora con este libro, pero tengo que reconocer que para el lector es pura dinamita. Cuando crees que ya lo has leído todo sobre ellos, llega una barbaridad aún mayor.
A pesar de que los tacha de poco talentosos, llevan 60 años en el panorama y dando que hablar. Sean talentosos o no, desde luego han sabido crear una marca y mantenerse después de tanto tiempo después, y de tres fundadores menos, al pie del cañón.
Arrogantes, mujeriegos, consumidores excesivos de todo vicio posible, acosadores, incluían de forma reiterada a grupis menores de edad en sus orgías y sus relaciones, saliendo totalmente ilesos de todos los delitos que ello conlleva e igualmente en temas de tenencia de drogas, dejando a su paso vidas destrozadas sin importarles lo más mínimo.
Y ni que decir de las mujeres de los Stones, que son la máxima revelación de como eran realmente estos hombres. Esas relaciones dicen mucho de ellos. Tal como llevaban sus relaciones era su vida, no puede haber una foto más real y que refleje mejor sus personalidades. Quizá analizando todo y a pesar de lo que le rodea me quedo con Keith, porque me parece que de todos ellos era el más íntegro. Cada uno que juzgue por si mismo…
Desde luego creo que es una lectura que no puedes perderte para descubrir más sobre la historia de esta banda, no sé si todo lo que se cuenta es real o se ha exagerado pero igualmente hay datos que están documentados que no te dejaran indiferente. Como dice la autora en uno de sus capítulos: “Cuanto mas brillante sea la luz, más profunda será la sombra”. Y aquí se pueden encontrar sombras oscurísimas. (Marisa Cuesta Moreno, 3 de abril de 2023)