El larguísimo reinado de Abderramán III (912-961) marcó el apogeo de la Andalucía de los Omeyas, donde tres religiones convivían en paz. En unos años, el sucesor del cruel Abdalá impuso su autoridad sometiendo a los señores rebeldes y apoderándose de Bobastro, que era la guarida del más conocido de...