El rey Salomón pedía a Dios que le concediese un corazón inteligente. Debido a los tiempos que corren y al siglo XX vivido, Alain Finkielkraut estima que tal oración sigue manteniendo toda su vigencia. Ante la imposibilidad de acudir a Dios, que calla, o a la Historia, decide recurrir a la literatur...