Estamos ante una obra impresionante. Fiodor Dostoievsky definitivamente es un genio y sus novelas representan un valioso legado para la humanidad. Esta novela es una completa maravilla. El libro no sólo cuenta una historia imaginaria, sino la historia del pueblo ruso, y de cómo este comenzará a revelarse constituyendo así una gran profecía de la que sería la revolución rusa. Es un libro muy rico, en cada personaje se puede apreciar distintas posturas del socialismo, es por ello que si se quiere disfrutar al 100% se debe leer con tiempo y sin prisas. Mas allá de la historia política que cuenta, veremos desde dentro la historia de la destrucción de un pueblo y de una familia. Me gustó especialmente el 3 libro que compone la novela, por la cantidad de sucesos que en él ocurren; por otro lado, me han encantado los personajes de Piotr Verjovenski, caracterizado por su enorme egoísmo, cinismo, manipulación y frialdad, así como también Nicolai Stavrogin, quizás el protagonista más misterioso y profundo que haya dado la literatura, torturado por sus propios demonios y enemigo de si mismo. Como nos tiene acostumbrado el autor, esta obra esta llena de pasajes apasionados y destacables por su crudeza, imágenes que difícilmente podré olvidar. Su final, como todos los del autor, me ha impactado sobremanera. En definitiva, nunca me cansaré de repetir que Dostoievsky es uno de los mejores escritores que ha dado la historia, y creo que Nietzsche no se equivocó cuando enunció “Dostoievsky, el único psicólogo del cual se puede aprender algo”. Por último, dejo una frase de esta gran obra, que me conmovió profundamente y la representa a la perfección “Proclamaremos la destrucción […] Se encrespará el mar, y se derrumbará todo el falso cotarro. Y entonces nosotros pensaremos en cómo levantar el edificio de piedra”.
hace 13 años