El conde de Penwood nunca reconoció a Sophie como su hija ilegítima, pero sí se ocupó de que no le faltara de nada. Todo cambió cuando se casó de nuevo con una viuda con dos hijas. Desde que ellas llegaron a la casa, la vida de Sophie se convirtió en un auténtico infierno. Al fallecer el conde, su testamento las obligaba a cuidar de la joven, pero ellas se encargaron de obligarla a trabajar de sol a sol y de que jamás lograra competir con ellas por las atenciones de los solteros londinenses. Como en el cuento de Cenicienta, Sophie acude a hurtadillas a un baile de disfraces en casa de los Bridgerton ataviada con un precioso vestido y una bonita máscara. Por unas horas será la mujer que siempre soñó, sin que nadie la juzgue por su origen ilegítimo. En el baile conoce a Benedict Bridgerton y entre ellos surge una atracción muy especial. Una magia que se rompe a las doce en punto cuando Sophie huye para regresar a casa y volver a ser la sirvienta en la que su madrastra la ha convertido. “Te daré mi corazón”, de Julia Quinn, es el tercer libro de la saga protagonizada por la familia Bridgerton. En esta ocasión el protagonista de la historia es Benedict, el segundo hijo de Lady Violet. A diferencia de su hermano Anthony, Benedict es un hombre que busca el amor verdadero. Ninguna mujer de las que conoce en los bailes a los que su madre le obliga a asistir ha logrado llenar el vacío dejado por esa misteriosa mujer enmascarada. Sophie es una luchadora que ha renunciado al amor. Sabe que no será feliz junto a un hombre que no sepa leer y que no podrá aspirar a alguien de la alta sociedad por su clase social. Es imposible que un noble se enamore de una simple criada. Con esta historia, Julia Quinn nos muestra las dos caras de la sociedad victoriana: la de la alta sociedad y su acomodada vida, y la de los criados que trabajan en sus casas, en muchas ocasiones en condiciones deplorables. Una preciosa novela en la que solo el destino podrá decidir el futuro de dos almas gemelas condenadas a amarse en la distancia por las rígidas convenciones de una sociedad clasista.

Tras la muerte del sexto conde de Penwood, el padre que jamás la reconoció como hija legítima, Sophie Beckett se queda completamente sola y en una situación muy precaria: sin un centavo y bajo las órdenes de su madrasta, que la deja seguir viviendo en su hogar, pero en calidad de criada. Una noche, con la ayuda y complicidad del resto del personal de la casa, Sophie acude por primera vez en su vida a una fiesta organizada en casa de los Bridgerton y por fortuna para ella, se trata de un baile de disfraces, con lo que la joven logra ocultar su identidad bajo su antifaz. Allí conoce a Benedict, el segundo de los hermanos Bridgerton, y solo unas horas de conversación son suficientes para que los jóvenes se enamoren de forma irremediable, aunque Sophie sabe que pertenecen a clases sociales diferentes y que su amor es imposible. Es inevitable que durante los primeros compases de esta historia al lector le acuda a la mente el famoso cuento de la Cenicienta. En este caso Sophie no pierde un zapato, sino un guante con las iniciales de su abuela paterna, pero antes de que su príncipe azul descubra dónde vive, Sophie debe huir de la ciudad e iniciar una nueva vida lejos de Londres, lo que imposibilita el reencuentro de los dos jóvenes enamorados, hasta varios años después. La trama de esta novela no destaca por ser muy compleja, pero es resultona y sin mucho esfuerzo, ha logrado captar toda mi atención. Admito que Benedict no es uno de mis favoritos entre todos los hermanos Bridgerton y de hecho, la proposición inicial que le hace a Sophie tras su reencuentro -sin saber que se trata de la joven que cautivó su corazón varios años antes- es algo que detesto encontrar en una novela y no ha ayudado a mejorar mi opinión sobre él. Sophie es una luchadora nata, una joven que a pesar de las vejaciones que ha sufrido a manos de su madrastra, conserva intacto su noble corazón y el coraje suficiente para afrontar los problemas que la van surgiendo en cada momento. Sin duda, se ha convertido uno de mis personajes favoritos junto a Violet, la madre de Benedict. Además de una historia de amor bonita, esta novela destaca por el toque de humor que emana de cada escena en la que interviene alguno de los Bridgerton. Los hermanos de Benedict son incorregibles y nos regalan momentos muy divertidos. A pesar de ser una novela sencilla y totalmente predecible, «Te doy mi corazón» ha sabido conquistarme y la he disfrutado mucho, así que estoy deseando continuar con esta serie para conocer la historia de amor de otro de los personajes que más interés me ha suscitado desde el inicio: la de Penélope Featherington, protagonista de la siguiente entrega.