"El olor a pulpa de manzana y el siseo de la sidra en fermentación, proveniente de la parte trasera de algunas viviendas, revelaban la más reciente ocupación de algunos de los habitantes, y se incorporaba al aroma de descomposición que las hojas moribundas despedían desde el suelo." Si hay algo que hará que me acuerde siempre de este libro, es la sidra... Ha sido una delicia de lectura esta primera toma de contacto con Thomas Hardy. Muy adecuada para leer en esta época otoñal, con esas descripciones del bosque, los campos, las hojas que caen, la recolección de la manzana... Me ha gustado mucho su estilo y me ha parecido una historia muy completa, tiene un poco de todo: costumbrismo, romance, un punto de humor (me reí mucho con alguna escena). La trama tiene varios giros que no me esperaba y hasta casi el final no sabes cómo va a terminar todo. Lo que menos me ha gustado es que la protagonista a veces me da un poco de pereza porque no sabe ni lo que quiere (el papel de la mujer en este tipo de clásicos siempre me cuesta, no lo puedo evitar, por mucho que sea consciente de que eran otras épocas); y algunas divagaciones filosóficas, que se hacen un poco cansinas. Por lo demás, tengo muchas ganas de seguir leyendo la obra de este autor.
hace 3 años