Esta novela, a mi entender, está escrita con dos finalidades distintas, que son válidas por separado o conjuntamente. La primera de ellas es divertir, cosa que lo consigue hasta el punto de ser una de las novelas más divertidas que me he leído en los últimos años. La otra es más intensa (para mí), analizar al ser humano y ridiculizar la hipocresía y los bajos instintos de nuestra sociedad mediante unos personajes cuyas acciones les traicionan, dejándolos al descubierto.
hace 13 años