Manuel aún es joven pero está cansado de viajar y decide retirarse, quiere vivir en el campo y regresa a Santa Cruz pero allí no vive nadie. Con ayuda de sus amigos compra el pueblo y rehabilita el antiguo monasterio medieval para convertirlo en hotel, quiere volver a ver gente paseando por sus calles. El y Malú, un precioso y dócil San Bernardo, serán durante algunos años sus únicos habitantes. Un día tras un gran temporal Malú rescata a Alicia prácticamente congelada. Su aparición hará de esta novela un nuevo cuento de hadas donde nuestros protagonistas lucharán por superar el pasado y se enfrentarán a Amalia absolutamente loca y convencida de ser quien no es que los enredará en su venganza y no dudará en matar a los culpables de la muerte de su madre y de su destino. El regreso es una novela, una ficción pero también un canto a las virtudes y a las miserias humanas, es la realidad de la vida; esa donde los rencores nos envuelven y la verdad se oculta tras veladas y oscuras mentiras. Es la vida misma, es el celo, el miedo al fracaso, a mirar a tras, es la sencillez, es la perdida, es la familia, es la honradez, es el engaño, es el amor y el desengaño. Plagada de relatos paralelos con temas tan actuales y atemporales como la violencia de género, el machismo, la pedofilia, el alzhéimer, la corrupción o embarazos tempranos y no deseados, esta historia nos confundirá y transportara del pasado al presente y nos desvelará que pese al progreso nuestros instintos poco han cambiado. Santa Cruz no es real, pero podría serlo.