Mucho se ha escrito sobre el género, el estilo y el significado de Cumbres Borrascosas. Se la ha calificado de novela sociológica, enigmática, misteriosa, de psicodrama ontológico y pasión metafísica. Incluso hay quien habla de una especie de cuento de hadas extendido. Y realmente, Cumbres Borrascosas es todo eso y mucho más. De hecho, Emily Brontë, como gran lectora del Paraíso Perdido de Milton, escribió Cumbres Borrascosas obsesionada con el mito de la caída de Adán y Eva, pese a la aparente ausencia de referencias a la obra miltoniana en la novela. Cierto que no hay referencia literal ninguna, y sin embargo, todas las voces narrativas de Cumbres Borrascosas, estructuradas en torno a círculos concéntricos, muy innovadores para la época, insisten en el tema del cielo y el infierno y la caída.
Porque Combres Borrascosas es exactamente eso, el relato de una caída, la caída de Catherine y Heathcliff, la caída como metáfora del enamoramiento romántico idealizado. Pero Catherine cae en el momento en que se separa de Heathcliff, de su yo alternativo, de su alter ego rebelde, de su anhelado látigo/Heathcliff, metáfora de la naturaleza, de su auténtico yo. Heathcliff y Catherine eran un todo, una entidad andrógina y juntos compartían su cielo/infierno, su particular Paraíso, hasta la caída, hasta el momento en que se separan, el momento en que Catherine entra en la adolescencia y se cree enamorada de Linton, cayendo así en el mundo de la sumisión y la cultura patriarcal. Porque Emily Brontë invierte los términos miltonianos, los reescribe, puesto que la caída de Catherine Earnshaw no va del cielo al infierno, sino al revés, del infierno al cielo. El cielo representa en la novela la Granja de los Tordos, propiedad de los Linton, mientras que el infierno es Cumbre Borrascosas, propiedad de los Earnshaw. Porque Catherine, al caer, comienza a asimilar y a resistirse al mismo tiempo a la idea de que el cielo, entendido también como la metáfora de lo convencional, del pensamiento dual y la cultura patriarcal, es algo que debe estar separado del infierno, el pensamiento no-dual.
Es en este sentido que Cumbres Borrascosas es mucho más que una simple historia de amor romántico o pasional, ambientada en los inhóspitos páramos de Yorkside, Inglaterra, para pasar al plano de lo metafísico y la subversión. Ciertamente, Cumbres Borrascosas, publicada en 1847 bajo el pseudónimo de Ellis Bell, es una novela victoriana, incluso gótica, pero sobretodo subversiva, que trata además de la orfandad, los orígenes de lo femenino, el porqué de la caída de la mujer y de su sumisión al mundo de la cultura, de la cultura patriarcal.
En Cumbres Borrascosas encontramos ya desde sus inicios confundidos el cielo y el infierno, la cultura y la naturaleza, el amor y el odio, la paz y la violencia. No hay separación. Los sentimientos de sus habitantes se expresan a través de las fuerzas de la naturaleza y se da rienda suelta a lo salvaje y a la libertad. Esa es la clave, no separar, porque todo forma parte de un todo (y curiosamente esa es la base del pensamiento no-dual, del pensamiento feminista). Es con la separación con lo que comienza la caída, la tempestividad y la agonía de Catherine y de Heathcliff, que se resisten pese a todo a ser separados, asimilados, para culminar con el triunfo de la cultura patriarcal, la cultura dual cristiana. Con el triunfo de lo convencional.

Es de las mejores historias que he leído!!!!

Celos, odio, pasión, amor, egoismo, venganza...

Los actos de nuestros protagonistas, convertirán el paraíso de sus vidas, en un verdadero infierno que llegará hasta la siguiente generación.

Un libro INOLVIDABLE.

“Todos mis dolores en este mundo han consistido en los dolores que ha sufrido Heathcliff, y los he seguido paso a paso desde que empezaron. El pensar en él llena toda mi vida. Si el mundo desapareciera y él se salvara, yo seguiría viviendo, pero si desapareciera él y lo demás continuara igual, yo no podría vivir. Mi afecto por Linton es como las hojas de los árboles, y bien sé que cambiará con el tiempo, pero mi cariño a Heathcliff es como son las rocas en el fondo de la tierra, que permanecen eternamente iguales sin cambiar jamás. Es un afecto del que no puedo prescindir ¡Elena, yo soy Heathcliff! Le tengo constantemente en mi pensamiento, aunque no siempre como una cosa agradable. Tampoco yo me agrado siempre a mí mismao. No hables más de separarnos porque eso es irrealizable”.

Apasionante, impactante y profunda son tan solo una muestra de los epítetos utilizados por la crítica a la hora de describir esta obra. Yo, sin embargo, discrepo con gran pesar con todos ellos. He de reconocer que el escenario dibujado por la mediana de las hermanas Brontë al comienzo de Cumbres Borrascosas es atractivo. Sin embargo, y con el devenir de los capítulos, el entusiasmo generado se va diluyendo en una trama folletinesca. Los personajes son ñoños, infantiles, consentidos; a cada cuál más, y ellos solos se bastan para crear un aura de pijotería en el reducido lugar donde se desarrolla la obra. Tan solo Heathcliff, erigido por méritos propios en protagonista, logra romper esta dinámica y salvar en cierto modo la novela. Y lo cierto es que, Heathcliff aparte, no hay mucho más que haya calado hondo en mí. El estilo no me ha enamorado y creo que Brontë no exprime la trama todo lo que podría. Una vez dicho esto, pido perdón si me he excedido en mis críticas hacia Cumbres Borrascosas. Recuerden, de todas formas, que esta no es más que una humilde opinión. Por mi parte, poco más que recalcar sobre esta novela. Una lástima no haber sabido disfrutar lo esperado de la misma. Nuevamente, pido disculpas.

Lo odié demasiado. Me resultó muy tenso y, además, todos los personajes eran odiosos e insoportables, no logré empatizar con ninguno. El romance de la trama me pareció irracional; me encontré con varios diálogos innecesarios y el final no me sorprendió.
Hacia el final la lectura se me hizo tediosa y terminé solamente para sacarme la novela de encima.

Para mí, mi libro favorito ahora y siempre. Para muchos, Cumbres Borrascosas puede ser tan solo una historia de amor trágica y pasional. Se queda ahí. Pero una lectura más profunda permite apreciar sus matices, como la autora fue capaz de crear un universo con personajes que destilan carisma y fuerza, que representan a toda la Humanidad. Para ser una novela victoriana trata temas muy duros, y creo que a día de hoy sigue sorprendiendo y escandalizando a pesar de tener casi 200 años. Un clásico de clásicos, imprescindible para todos. Una obra maestra.

Si estás leyendo esto porque tienes dudas de si leerlo o no, por si no sabes si la ambientación y el tipo de trama te va a enganchar, porque no eres de romances clásicos, olvídate, léelo. A mi no me gustaba este tipo de libro del estilo Emily Bronte hasta que probé esta maravilla de la literatura clásica. Eso sí, tienes que saber valorar los clásicos como lo que son.

Hasta ahora el peor libro que he leído.
La historia es bastante tediosa y odiosa, que busca ser una de romance oscura y trágica, pero es, en realidad, pretenciosa y edgy.
Es sobre los enredos y desquites de cretinos que no tienen cuánto mínimo algún contraste positivo, o alguna explicación del porqué son así (Tony Buddenbrook de Los Buddenbrook es una cretina mejor escrita), o bien, como Nelly, Isabella o Edgar, que son absurdamente e irrealmente bondadosos siendo más recursos argumentales que la trama necesita para avanzar que personajes. Lo más decente es Heathcliff, con quien por lo menos se entiende por qué es una basura de persona, y aún en esas, es estropeado su trasfondo, por, al parecer, ser un infeliz con la mala suerte de conocer gente horrible.
Con semejantes personajes, la historia resulta ridícula e infumable. Qué desperdicio de tiempo y de cuatrocientas y pico de páginas.

Cuando termine de leer este libro tenía sentimientos encontrados, me gusto y mucho, pero puedo comprender a la gente que no le gusta. Es una historia donde nuestros protagonistas no rayan en lo "típico" , ya que se muestran con rencor, odio y con sed de venganza y en cierta manera eso para mi los hace más humanos que otros. Esta historia puede pintarse como la clásica historia de amor donde la clases sociales los separan cuando ellos se pertenecen, y lo es, pero tiene ese plus de no saber que fue lo que paso para llegaran al punto donde comienzas a leer, que te hace sentir toda clase de sentimientos: amor, rencor, dolor; los odias y los vuelves a amar y ese final aunque fue trágico no pudo tener uno mejor.

No me gustó para nada este libro, por más que lo pintan como una historia de amor sólo lo puedo ver como todo lo contrario, una historia donde reina el rencor, el odio y la falta de compasión y empatia. Termine este libro sólo por darle la oportunidad de sorprenderme y al final lo hizo pero de muy mala manera. Casi una tortura PARA MI!!

¡Gran novela!. Me ha gustado mucho y no me ha decepcionado nada. Es verdad que no tiene un final feliz y que en muchas ocasiones gustaría que el desarrollo de la trama siguiese por otros derroteros pero, creo que, en esa crueldad del argumento radica la fuerza y el atractivo de la novela.
Al centrarse la historia en pocos personajes ( muy bien trabajados y definidos) , centrarse el enclave a 2 ubicaciones ( Cumbres y Granja) y centrarse el argumento en las relaciones amor-odio-venganza de los personajes ( sin que sucedan grandes acontecimientos...) , la autora consigue centrar la atención del lector hasta el punto de analizar y cuestionar las complicadas personalidades , las reacciones y comportamientos y la profundidad del ser humano.
Todo ello, ambientado en un escenario acorde con la trama como son los páramos de Yorkshire y envuelto en la temática de la época que además afectó de cerca a Emily Brontë como:
* La diferencia de clases sociales
* La relegación de la mujer a la educación y la cultura
* La inquietud por los libros y literatura
* La muerte prematura, la terrible tuberculosis, la pérdida de la figura materna
* La religión en su aspecto más estricto
* La adición a la bebida y al juego
* El patriarcado y las leyes de mayorazgo de los testamentos...
hacen de esta novela un gran clásico y cuyo título "CUMBRES BORRASCOSAS" engloba todo
( el paraje , su climatología, el significado del apellido Brönte y los tortuosos caminos del alma humana)

Si pudiera definir a este libro, con tan solo una palabra, sin dudas, yo elegiría “Ambientación”.
Cumbres Borrascosas es muy probable que se haya convertido en el mejor libro que no solo leí en este año sino que haya leído en toda mi vida. Su Sensibilidad, sus personajes y sobre todo su historia y la manera en la cual está contada, hacen que este libro sea realmente especial.
La prosa de Emily Bronte es sencilla, es clara, es amena, pero con una sensibilidad y elegancia tremenda. Como se nos describe los ambientes, los personajes, las diferentes situaciones y en especial los sentimientos que tienen los protagonistas dentro suyo es digno de admirar.
Bronte hace que cada uno de ellos sea uno con el ambiente, ellos respiran y son uno con el norte de Inglaterra, son uno con la época en la que viven.
Cada personaje está lleno de vida, y no escatiman sentimientos, furia, maldad y sobre todo amor. Aunque este último sea el principal problema en sus vidas.
¿De qué trata?
El señor Lockwood un caballero ingles llega a los páramos de Yorkshire, Norte de Inglaterra, para retirarse momentáneamente de la vida de la ciudad y sumergirse en la tranquilidad de la naturaleza. Cuando Conoce a su casero el Sr. Heahtcliff que vive a pocos kilómetros de la granja de donde él alquilo, se sorprende por su inhóspito comportamiento, como así también de las personas que viven con él. Por el inconveniente de una extensa nevada se ve obligado a pasar la noche con ellos. En una antigua habitación que se le fue dada para que pueda descansar, encuentra unos diarios de una chica llamada Catherine Earnshaw, aburrido los lee y más tarde decide acostarse. Sus sueños poco a poco se convierten en pesadillas, donde sueña con la autora de aquellos diarios. Lockwood aterrado, regresa en la granja de los Tordos, en una fuerte nevada, donde cae enfermo y se encuentra con una señora llamada Dean, ama de llaves, esta le relatara los a acontecimientos que sucedieron en aquella familia, como así los del lugar.

Me lo acabe de leer hace poco y aun que al principió me costo seguir con la lectura por su comienzo ( un poco lioso ) me alegro mucho de haberlo hecho, de haber seguido con ella. Estoy haciendo la colección de novelas eternas y hasta el momento es la que mas me ha gustado sin duda, lo tiene practicamente todo. Desde un romance inusual, con un vinculo realmente fuerte entre los amados, las relaciones entre todos los personajes, el paso del tiempo y de como puedes llegar a tenerlo todo y quedarte sin nada o viceversa. Otra cosa que me gustaría destecar de la novela es la manera en la que Emily Bronte se desenvuelve, yo misma me reía cuando leía algunas cosas. Es una novela que no deja indiferente a nadie. La recomiendo.

Mi libro preferido en el mundo.
“Mi amor por Linton es como el follaje de un bosque, y estoy completamente segura de que cambiará con el tiempo, de la misma manera que el invierno transforma a los árboles. Pero mi amor por Heathcliff se parece al cimiento eterno y subterráneo de las rocas; una fuente de alegría bien poco apreciable, pero no se puede pasar sin ella.” (Cathy) #EmilyBrontë

Magnífica novela gótica que se desarrolla en los páramos de Yorkshire, donde el señor Lockwood, nuevo inquilino de la Granja de los Tordos, visita a su casero, el señor Heathcliff, para descubrir a un personaje tosco y huraño que enseguida incita su curiosidad. Y enlazando una historia dentro de otra, será la señora Dean, su ama de llaves, la que le hable a Lockwood sobre Heathcliff, su llegada de niño a “Cumbres Borrascosas” y el trágico drama que unió a la familia Earnshaw y a la familia Linton.<br>
Una historia cruda de venganzas y pasiones, con personajes complejos, oscuros, malévolos, egoístas y atormentados. Semejante explosión de sentimientos y la atmósfera opresiva que se respira, sumados a una prosa soberbia, atrapan y fascinan al lector. En mi opinión, un clásico literario excelente e imprescindible.

LA CRÍTICA DE SU TIEMPO FUSTIGÓ SU CONSTRUCCIÓN DESMAÑADA, LA INEPTITUD DE LA AUTORA PARA FUNDAR IDEAS FILOSÓFICAS O ESCLARECER LA NATURALEZA HUMANA. AUNQUE NO HAN PODIDO ENCONTRARLE SENTIDO CABAL SU HERMANA CHARLOTTE NI CRÍTICOS SUCESIVOS (MÁS ALLÁ DE LA VICTORIA DEL CAPITALISTA), HAN VALORADO EL ECO SHAKESPEARIANO DE SUS MONÓLOGOS.

Si buscan una historia de amor y personajes todos amables, no lean esto. Hay que estar abierto y poder admirar una historia llena de locos, injusticia y malas decisiones. Disfruté muchísimo la lectura de este libro.

Una historia de amor &uacute;nica. Cumbres borrascosas no es la t&iacute;pica novela de romance del S. XIX, este libro nos narra una historia amorosa, oscura, donde los personajes se adentran en un remolino de emociones. Una lectura llena de misterio que te deja en vilo hasta la &uacute;ltima p&aacute;gina, es pegadiza y adictiva y te atrapar&aacute; desde el primer momento. Realmente recomendable.

Me encanta que Cumbres borrascosas haya sido uno de los dos libros más votados para que reseñe, porque es uno de mis preferidos; una gran historia de amor que nos traslada, desde las primeras páginas, a otro mundo, lejano y olvidado en los páramos de Yorkshire, Inglaterra, a mediados del siglo XIX. Además, es un texto ideal para leer en invierno, con una taza de rico chocolate, tapados con una manta en un cómodo sillón, protegiéndonos de esa naturaleza tan hostil, ese paisaje gris, agreste y desolado, que acompaña constantemente a los personajes que se debaten entre grandes pasiones.
Cumbres borrascosas se publicó por primera vez en 1847, y su autora, Emily Brontë, se refugió tras el seudónimo masculino de Ellis Bell. En tiempos de la reina Victoria no estaba bien visto que una mujer estudiara, y muchos menos, publicara una novela. Y si lograba hacerlo, el libro sufriría las consecuencias: toda crítica se justificaba aludiendo que la literatura no era una actividad destinada a las damas, como el casamiento o la enseñanza.
De esta manera, a pesar de que Emily y sus hermanas tenían acceso a ciertas lecturas porque su padre, párroco del pueblo, les permitía leer y escribir, a la hora de publicar debieron hacerse pasar por hombres: Charlotte era la hermana mayor y publicó la novela Jane Eyre como Currer Bell, mientras Anne, la hermana menor, publicó Agnes Grey como Acton Bell.
Las costumbres e ideas de la era victoriana condicionan no solo la vida de la autora de Cumbres borrascosas, sino también la trama de su única novela. Catherine y Heathcliff han crecido juntos –el padre de Catherine adopta a Heathcliff- en el aislamiento de un paisaje alejado del pueblo y se aman apasionadamente, pero los prejuicios sociales y las diferencias de clase son más fuertes cuando Catherine tiene un accidente y se ve obligada, por el clima y las distancias, a vivir un tiempo en la casa de unos vecinos ricos.
Ella conoce otro mundo y quiere formar parte, mientras Heathcliff queda aislado, ya que su única unión real con la familia, además del padre adoptivo que ha muerto recientemente, lo desprecia. El muchacho huye en una terrible noche de tormenta, para regresar años después, cuando Catherine ya está casada y embarazada de una niña. Por su parte, Heathcliff ha logrado convertirse en todo un caballero y quiere vengarse.
Así comienza un drama que abarca más de una generación, con personajes que se debaten entre la obsesión y la pasión, el amor y la venganza, la naturaleza salvaje y las apariencias, en un ambiente por momentos tenebroso e inquietante, en el que no quedan afuera los elementos sobrenaturales.
Por último, me parece importante destacar la estructura narrativa, tan innovadora en su época. La historia principal se encuentra enmarcada por un presente en el cual el ama de llaves comienza contándole los hechos pasados a un extraño que viene a alquilar la propiedad, para terminar siendo espectadores de los nuevos sucesos con los que concluye la trama. Me parece importante comentarlo porque la primera vez que leí Cumbres borrascosas me costó al principio comprender la relación entre los personajes, sobre todo porque hay dos Catherine. Pero una vez que nos adentramos, como lectores y testigos privilegiados, en esta historia, no podemos dejarla. Por eso la recomiendo: son casi 500 páginas ideales para recorrer en estas vacaciones de invierno.

No sé qué esperaba encontrar al abrir “Cumbres borrascosas” de Emily Brontë. Sabía que era una historia trágica, pero me topé con una historia bastante más terrible de lo que esperaba.

Todo comienza cuando a Cumbres Borrascosas, la mansión de los Earnshaw, llega Heatchcliff, un niño abandonado en las calles de Liverpool. Su aspecto agitanado y su fiereza se ganan el cariño de Earnshaw y su hija, que se convierte en su amiga inseparable.

Pero la mujer de Earnshaw y su hijo no opinan de igual manera y se esfuerzan en someterle a todo tipo de desprecios y malos tratos. El punto álgido de su odio llega cuando tras la temprana muerte de Earnshaw, su hijo se convierte en el dueño de la propiedad. Con terribles castigos físicos transforma al muchacho en una bestia sin alma; privándole, además, de todo tipo de educación o relación con el resto de miembros de la familia.

Cuando su amada Catherine decide casarse con Edgar Linton, Heathcliff se marcha de Cumbres Borrascosas completamente destrozado. Vuelve tres años después convertido en un hombre adinerado con ansias de venganza: quiere destruir a todos aquellos que convirtieron su vida en un infierno.

La novela está narrada a dos voces. Una de ellas es la de Nelly Dean, el ama de llaves de La Granja de los Tordos, quien le cuenta al Señor Lockwood, su inquilino, la trágica historia familiar. Después será el propio Lockwood quien relate el resto de la historia según se la contó Nelly.

Toda la novela transcurre en los páramos de Yorkshire y dos únicos escenarios: Cumbres Borrascosas y La Granja de los Tordos. En tan solo esos lugares se concentra todo el amor, el odio, la humillación y la venganza que contienen los treinta y cuatro capítulos de esta oscura historia

Heathcliff pensaba encontrar consuelo en su terrible vendetta. Pero tras llevarla a cabo se encontró completamente perdido y vacío. Echaba terriblemente de menos a la única mujer a la que amó en su vida.

¿Merecieron la pena tanto dolor y sufrimiento? Solo él y Catherine lo saben, allá donde estén.

Una historia m&iacute;nimo interesante, la cual cobra mucho m&aacute;s sentido al estudiar el estilo de vida reclusivo y solitario, en los paisajes agrestes de la regi&oacute;n de West Yorkshire, de la escritora. Emily Bront&euml; creci&oacute; en la regi&oacute;n de los p&aacute;ramos ingleses, aunque en diferentes momentos de su vida vivi&oacute; en otros lugares, ella acab&oacute; volviendo siempre a su pueblo, que aunque era una regi&oacute;n pobre y de mala calidad de vida e higiene en su &eacute;poca, era donde ella estaba a gusto. La historia transmite esa sensaci&oacute;n l&uacute;grube del ambiente semirural de la &eacute;poca, y aunque la escritora hablaba poco con la gente, le gustaba escuchar sus historias y analizar el comportamiento de las personas. Desarroll&oacute; una historia con personajes duros, vengativos y de malas intenciones. Para leer esta historia, hay que estar ambientado al lugar y cultura de la &eacute;poca, de otra manera, la lectura se hace pesada y dif&iacute;cil.

No es la t&iacute;pica historia que suele atrapar al principio, ni en la que uno tiene compasi&oacute;n por los personajes principales. Pero es una historia a la que hay que prestarle mucha atenci&oacute;n al principio para irla entendiendo bien en el desarrollo. A medida que se va desarrollando la historia, atrapa y entretiene m&aacute;s. B&aacute;sicamente, la historia trata de unos personajes que dejan que sus vidas se muevan por el odio y la venganza, dejando evidente que muchas veces somos nosotros mismos los que elegimos vivir mal, pudiendo vivir en condiciones mucho mejores. La historia nos narra c&oacute;mo las personas vengativas y rencorosas acaban arruin&aacute;ndose ellas mismas, y tambi&eacute;n a los dem&aacute;s. Pero tambi&eacute;n, la historia nos demuestra como muchas veces las personas son como son, no por que sean as&iacute; de nacimiento, sino que se han juntado con las personas inadecuadas en el transcurso de la vida, pudiendo cambiar de actitud por voluntad propia.