Farrell, un carpintero obsesionado con los detalles, se ocupa de la restauración de una mansión en Dublín cuando conoce a Grace. Su historia de amor podría ser una más, pero el germen que habita en el corazón de Farrell la convierte en algo muy distinto: el pasado y el presente se confunden. El desprecio en sus formas más punzantes pasean por las páginas de esta novela como fantasmas de algún secreto innombrable. En Un nombre propio, Catherine Dunne explora, con inteligencia, los complejos matices del amor: la obsesión, los celos, el rechazo, hasta adentrarnos en un universo psicológico tan fascinante como perturbador.