Me parece un gran acierto que haya elegido Fisterra para ambientar la historia, en consonancia con el tono mágico y misterioso que envuelve la trama. Me ha gustado el recurso de que cada personaje nos cuente su visión de lo acontecido, permitiendo que avancemos lentamente en nuestro propio conocimiento de lo que sucedió, y que vayamos descubriendo, de forma sutil, el cambio experimentado por cada uno de ellos en los 25 años transcurridos.
hace 1 mes