Un libro escrito por Groucho siempre será un libro ameno y divertido, ya sea en forma de narrativa o en forma de cartas, pero tengo que admitir que me esperaba otra cosa. Después de leer "Groucho y yo" en la que Groucho da rienda suelta a su imaginación, "Las Cartas de Groucho" me ha dejado una sensación agridulce. La razón de esto es que la mayoría de las bromas con doble sentido que hace Groucho o cualquiera de sus corresponsales no se entienden fuera de la época en la que se hicieron, a no ser que conozcas cada anécdota o personalidad de cada presidente estadounidense o de cualquier amigo o presentador o comediante de la época de Groucho. Imagino que para quien conociera bien al tipo en cuestión del que se habla sería muy divertido. No obstante, no digo que resulte un libro aburrido o malo. Me he reído muchas veces leyéndolo y he disfrutado, pero no tanto como pensaba.
hace 13 años