La taberna de Silos es una novela negra ambientada en el siglo XIII con un comienzo muy original. El protagonista, Gonzalo de Berceo, está alojado en el monasterio de Silos con el encargo de copiar un manuscrito latino. Se encuentra comiendo con los frailes del monasterio cuando uno de ellos halla un dedo humano en su plato, para horror de los presentes. Desde su llegada al monasterio, las cosas se habían torcido para Gonzalo: es un forastero que despierta recelo, sobretodo porque trata de resolver los misterios y crímenes acontecidos allí.

Esta obra es el debut como escritor de Lorenzo G. Acebedo, que logra articular una suerte de thriller medieval de lo más inusual y adictivo. Narrado en primera persona, resulta fácil simpatizar con su desventurado protagonista, que se ve obligado a aceptar un encargo en el monasterio de Silos y sufre una estancia convulsa desde el primer día. No obstante, su naturaleza perspicaz e intuitiva le lleva a tratar de arrojar luz sobre el supuesto suicidio de uno de los frailes y otros enigmas. Para ello, contará con la ayuda de la valiente y bella Elo, una tabernera muy independiente y leída; y de Lope, un carismático peregrino con una afición excesiva por el vino.

Por otro lado, la obra refleja la tensión existente entre el papado y los monasterios: mientras el primero luchaba por tener a las órdenes bajo su control, éstas se resistían a perder su independencia económica. Así, el monasterio de Silos, lejos de caracterizarse por la paz y el recogimiento, resulta ser un lugar podrido por la ambición de poder y dinero.

Así pues, La taberna de Silos es una novela negra que cuenta con frailes peculiares, abades codiciosos, borrachines de taberna y mujeres liberadas. Una obra original y con toques de humor, que deja con ganas de más. (Ana Rayas, 13 de octubre de 2023