¿Eres de las que suspiran con las novelas de Jane Austen? ¿Ves Vacaciones en Roma cada vez que la reponen? ¿Te has tronchado con Mi familia y otros animales? No digas que no te regodeas con uno de esos reportajes maravillosos de ¡Hola! Pues aquí tienes la combinación perfecta. La joven protagonista de nuestra novela, una periodista recién salida de la facultad y del cascarón, se ha criado, literalmente, entre la flor y nata de la sociedad: su padre es el dueño de la revista más famosa del ámbito hispano, y una de las más reconocidas en todo el mundo. Criada con una mezcla de cariño incondicional, ascetismo castellano, disciplina prusiana y el surrealismo intrínseco a las familias españolas, nuestra joven heroína, ni guapa ni fea, ni alta ni baja (más bien bajita), es extremadamente responsable y familiar, pero tiene muchísimo sentido del humor y más ganas de demostrar su valía a su hiperprotector padre. Cuenta con el apoyo de su madre, de su abuela y, sobre todo, de su hermana, que como Pippa Middleton, es la protagonista en la sombra de la novela. Su primer cometido es seguir el romance entre un joven aristócrata inglés del más rancio abolengo y una consentida italiana. Si el trabajito ya de por sí no es sencillo (e implica lidiar con egos caprichosos, montar a caballo, ser detenida en una aduana con un modelazo de Valentino, salir a avistar bandadas de patos al amanecer, etc., etc.), la cosa se complica gravemente cuando cae fulminada de amor por el excéntrico lord a quien, «aparentemente», nuestra protagonista solo inspira una leve simpatía.