Me gustan todos los libros de esta autora. En esta novela empieza de menos a más. Cuesta bastante crear un interés en el libro pero cuando empieza a entrar en materia ya no se puede soltar. Es una historia muy dura, estremecedora por lo duro del relato pero sobretodo porque eso pasó, la gente sufrió. Esta novela se centra en invocar un pasado desarrollado en la II Guerra Mundial. En una huida de Leningrado durante su asedio. Se narran hechos muy duros, el hambre, el frío, el miedo, la represión del sistema. Hay varias escenas del libro especialmente crueles, ojalá formaran parte de la imaginación de la escritora. Lo recomiendo, como todos los de la autora. Pero su mejor obra sigue siendo El Ruiseñor.
hace 1 año