Un libro simpático que cuenta, aunque no aclara la razón por la cual tantos extranjeros, sobre todo ingleses, deciden venirse a vivir al sur. Esta vez es Chris y su mujer, un ex-componente de la banda Génesis que se compró un humilde cortijo en lo años 80. Yo soy asidua a este tipo de lecturas, como la de Brenan o Michael Jacobs. Todos ellos se vienen a Andalucía, pero no a su costa, sino a pueblos perdidos del interior a compartir la vida con sus gentes. Está a mitad entre la novela y un diario de experiencias
hace 6 años