Coincido completamente con el usuario del comentario anterior. Si bien es verdad que el autor vuelve a demostrar una gran capacidad de sintaxis (de lo poco positivo que tiene el libro) algunos capítulos no hablan o hacen referencia a nada, es sólo escribir por escribir como si el autor se aburriera o pensara que estaba escribiendo en un foro de poseía o rimas. Sólo en unos pocos capítulos narra anécdotas sobre su vida personal y profesional, que tampoco son de gran trascendencia. El único capítulo que me gustó fue el del restaurante, haciendo referencia a las relaciones amorosas a mi entender.
hace 7 años