Es el primer libro que me leo de esta autora, después de recomendármela durante mucho tiempo, y la verdad que me ha gustado mucho y me leeré más. Me lo he leído directamente en francés. Al principio parece triste y un poco monótono, pero lo que consigue sin darte cuenta es llevarte al mundo de Balanda, a sentir la monotonía de su vida y a su hastío. Al final de la historia, te quedas con ganas de saber más, de seguir con la historia, y eso es lo que a mi me hace querer leer más libros de ella.
hace 7 años