Madrid, octubre de 1956. Un censor eclesiástico aparece muerto en la butaca de un cine con un rollo de celuloide en la boca. Tirando de ese hilo, León Lenoir, Emilio Sanz y Paloma Ríos destaparán un asunto de altos vuelos en el que se mezclan estraperlistas, especuladores, cineastas, jerarcas delrég...