¡Qué rabia, qué rabia me da! No he podido pasar de los primeros capítulos. Intenté leermelo al derecho y al revés y nada. Intententé esforzarme en avanzar un poco más antes de rendirme y me di cuenta de que me ponía excusas para no leer (y eso sí que no). Quizá en un futuro vuelva a intentar leerme Rayuela, de momento me parece muy aburrido, con muchísima palabrería vacía que no cuenta nada. He perdido este asalto...

Acabo de terminar Rayuela y un extraño sabor me impregna la boca... Contradicción. Es una novela de todos y de nadie... Me ha transmitido sentimiento, sí, pero a veces se me hacía soberanamente aburrida e incluso tediosa. Amo y odio esta 'contranovela'. Amo a La Maga, odio a Oliveira, amo cada calle de París, cada charla del club de La Serpiente y ese sentimiento de angustia, melancolía, decadencia y amor... Esa vorágine que desprende cada palabra... Quizás lo que 'odio sanamente' de la novela es esa madurez intelectual, filosófica y artística de la que yo carezco. Es una novela que no la puede leer cualquiera, pues exige una base cultural consolidada. Algunas partes del argumento no acabaron por engancharme, y leía con hastío, sobre todo cuando Rayuela cambia su epicentro parisino por Argentina, ya que, para mí, en la segunda parte de la novela, 'los relatos de acá', el hilo argumental pierde fuelle y se desprende de una parte de la esencia de la novela que sólo flota en el aire de París. Comencé la lectura siguiendo el orden propuesto por Cortázar, pero acabé leyéndola en el orden tradicional, ya que es muy cierto que los capítulos prescindibles son prescindibles, algunos, relleno, otros, cautivadores. Considero que es una obra que nunca se termina, sino que su lectura debe ser continuada, que se debe leer infinidad de veces para exprimirle el jugo de su esencia. Confío y espero que la próxima vez que la lea me impregne por entero. Con una lectura ni siquiera se puede opinar, por ello, no la voy a calificar por el momento. La próxima vez que la lea, haré otra crítica más exhaustiva y con más criterio.

Me aburrió después de76 páginas, puedo reconocer que en su tiempo sería un innovador literario tanto por la forma de las narraciones como por la forma de contarlas pero a mí me marea tanta cita en francés, tanto alardeo cultural , tanto nombre de músico de jazz que no conozco..y tanto devaneo intelectual. Me siento como Woody Allen en el personaje de aquel tipo , que interpreta él mismo en la cola del cine escuchando la conversación de un intelectual presumiendo con un lenguaje impodible de lo que sabía...Además más del 50 por ciento de las conversaciones en este libro hablan "del sexo de los ángeles"..Seguro que me tachareis de inculta pero a mis casi 64 años no estoy para perder el tiempo aburriéndome soberanamente.

Coincido con otros lectores, es una prosa magnífica, te atrapa en la primera página pero luego te va soltando...Hasta hacerte preguntar que estás leyendo...Para el estudio de la literatura es una obra magnífica, ahora quien espere algo, algún giro argumental, algo de la trama que sobresalga pues que espere sentado porque no ocurre nada hasta que se vuelve insoportablemente aburrido...Es de las cosas más extrañas que he leído en mi vida, Y lo he dejado a mitad. Me ha dolido pero lo he dejado.

Quizás es que lo leí con demasiadas expectativas, que por la época y el origen tenía en mente a dos de mis favoritos como Borges y Márquez, pero se me hizo pesado y quizá un tanto pretencioso. Una lectura difícil no por su profundidad (que no es tanta como pretende aparentar) sino por la exposición, con párrafos interminables llenos de frases interminables: párrafos que ocupan toda una página y frases subordinadas de subordinadas de subordinadas. Parece que el autor tenga cierta alergia al uso del punto. Hay que reconocer ciertas frases y hasta capítulos, pero es poco grano entre tantísima paja mental. En cuanto a la trama, apenas existe. De ahí que existan varias lecturas posibles, que puedan intercambiarse u omitirse capítulos sin que afecte a la coherencia del conjunto.

Se me hizo un libro tedioso, batalle para terminarlo.

Se me hizo eterno,esperando siempre un giro en los acontecimientos que nunca llego. Larguisimo. Como se suele decir en las rupturas de pareja,"no eres tú,soy yo"(eso me dice el libro)

Decepcionante, es la única palabra que se me ocurre al describir esta obra, un libro aburridísimo, uno espera una genialidad cuando se sabe que el libro puede ser leído de dos formas (o varias según los fans de Cortazar), y tienen razón, la tradicional y la tradicional con RELLENO, obviamente es algo que no te dicen. Dejando este gran detalle (por el cual se supone que difiere Rayuela de los demás libros), la historia que narra es tan casual, tan cotidiana que resulta aburrida. Las personas que no se identifiquen con grupos "intelectuales" y gusto por el jazz no lo lean, van a perder el tiempo. Oirán que el libro es una genialidad, pero no lo es actualmente, lo fue tal vez; tal vez sólo fue una tendencia intelectual de hace algunos años que se trata de rescatar. Yo invito a la gente a leer comentarios en toda la Web y se darán cuenta que la gente a su favor parece sólo tener una idea infundada, la gente que está en contra explica los capítulos o lo que le pareció mal tratando de dar bases a sus argumentos. Disculpen la dura crítica pero no debemos construir templos donde no los hay.

Recuerdo y siempre recordaré el verano que leí Rayuela, diferentes situaciones me permitieron disfrutarlo tranquilamente, y cuando lo acabé no tenía la sensación de haber leído uno de los mejores libros de mi vida, sino que tenía la sensación de haber hecho una de las mejores cosas de mi vida. Rayuela para mí es algo más que un libro, me cambió la forma de ver la vida.

Es uno de esos libros que o bien entusiasman o producen rechazo. En su día fue toda una audacia por su técnica, su complejidad estilística, y su singular composición; ya que te permite seguir de una forma un tanto arbitraria sus pasajes. Pero aparte de este laberíntico juego experimental, está la hondura desgarradora de sus personajes, y una curiosa historia de ansiedades y de dependencias. Considerada por muchos una obra maestra, para mí fue un reto interesante por su lenguaje, su ingenio, y sus renovadas formas. Cortazar merece estar, sin duda, entre los más grandes.

El mejor libro que he leído en mi vida, bueno lo leí hace mucho tiempo pero es mi favorito. muy entretenido y misterioso. muy recomendable.

Libro bastante lento, debes de estar muy concentrado a la hora de leerlo, lo leí de forma salteada como el autor aconseja, recomendaría leerlo de forma tradicional de inicio y si al finalizarlo te gustó la historia, leerlo de la segunda manera. A mí parecer está muy sobre valorado, aunque cuenta con algunos buenos pasajes.

Leer Rayuela es como descubrir la literatura por primera vez. La prosa de Cortázar es sencillamente inigualable.

Un pequeño rincón en el cual refugiarse, un libro para estar.

Reconozco que es una obra maestra, llena de matices, sobre todo si tienes una buena base cultural. No es mi caso pero igualmente lo leí entero, en el orden propuesto por cortazar, más por pura atracción que por comprensión. En mi opinión merecería minimo un notable alto pero, en base a lo que realmente me gustó, tan solo puedo calificarlo de suficiente

Hablar de Rayuela es hablar de uno de los tres pilares básicos, junto con Nietzsche y Saramago, de mi formación literaria autodidacta. Una novela, una “contranovela”, mejor dicho, pues esta fue la nomenclatura que el propio Cortázar le dio, que rompió todos los esquemas de la narrativa de la época. La historia parte de la introspección de Horacio Oliveira, en su vida de falso estudiante argentino en París (Del lado de allá), si bien lo primero que escribió el autor fue el mítico capítulo del tablón, que haría el número 41 en la novela (Del lado de acá), después de la vuelta de Horacio a Argentina. Todo lo demás surge a partir de aquí, una historia que trata magistralmente los grandes temas, el amor (el personaje de Luppi en Lugares comunes la cataloga como la historia de amor más desgarradora que conoce), los celos, la muerte, pero envuelto en un, a priori pretencioso, maremágnum cultural, del que se acaba disfrutando como un niño con juguete nuevo y que abarca desde la literatura, la pintura a la siempre presente música de jazz, con Jelly Roll Morton o Louis Armstrong, entre otros. Al respecto diré que es una auténtica gozada disfrutar de las discadas y sentirse uno más del Club de la Serpiente, escuchando lo que ellos escuchan, transportado a la buhardilla de Oliveira y la Maga, mientras se leen aquellos pasajes. Existe un disco que engloba todos los temas a los que se hace mención en la novela: Jazzuela (playlist disponible en mi Grooveshark). También disponible en Spotify (Jazzuela) Volviendo al argumento, cabe mencionar la tercera parte de la novela, De otros lados, en el que aparece el personaje del escritor Morelli, alter ego de Cortázar con el que complementa todo lo que no hay de él en Oliveira, recurriendo a contenidos metaliterarios en los que expone su visión de la narrativa, amén de pasajes de bellísima prosa literaria y del más sugerente surrealismo. Imprescindible. La bohemia del París de mediados del siglo XX en todo su esplendor.

Libro recomendado para todo verdadero amante de la literatura. Posiblemente la mejor novela en habla hispana del siglo XX. Para mí lo es, y con diferencia.

La verdad es que como novela no es demasiado buena, pero he de reconocer que es el libro del que más frases he subrayado en mi vida, y no solo porque sea un libro largo. Por si condiciona, he de decir que lo leí salteado de la forma que propone Cortázar. Con respecto a esto, que nadie espere que lo de poder leer el libro de distintas maneras es como lo de los libros de «Elige tu propia aventura». Aquí lo que pasa es que la historia no es importante y la mayoría de capítulos son bastante independientes.

Hermoso libro, lleno de poesía. Sin dudas uno de mis favoritos, quizás por sentirme identificado con el personaje en el momento de mi vida en que lo leía. Lo lei de forma alternada como recomiendo el autor, lo voy a releer de forma corrida. Para una primer lectura recomiendo leerlo de corrido.

(Ante todo, decir que leí 200 páginas y en el orden tradicional (no el propuesto por Cortázar)). Rayuela es un experimento literario en que Cortázar se olvida del todo del lector y se deja llevar. Parece casi como si el autor quisiera aun maltratar al lector poniéndole las cosas difíciles. Ese egoísmo le permite experimentar libremente, y de hecho como renovación de la literatura me parece una genialidad. Pero considero que toda literatura, por experimental que sea, ha de ser invariablemente atrapante, ha de haber un mínimo para con el lector. Un libro que aburre, o que por lo menos no invita en lo más mínimo a seguir leyendo una vez terminado cada capítulo (que fui leyendo con espacio de varios días), no puede ser calificado de buen libro por geniales que sean sus pretensiones, aunque eso va a gustos. Lo bueno: -El lenguaje y el vocabulario me parecieron fascinantes. Es una literatura absolutamente "abierta" y desestructurada y bella. Si se es escritor, ayuda a atreverse a romper con moldes gramaticales. Es cierto que constantemente cita a otros artistas, piezas musicales, etcétera, y es cierto que no profundiza nada en ellas sino que las expone como en un catálogo, pero no me molestaba. Lo consideré parte de su estilo. -Los personajes son profundos y con personalidades bastante definidas, y las relaciones entre ellos también. Nada que objetar aquí. -(Lo leí en el orden de primer capítulo hasta casi la segunda parte de forma tradicional, así que no puedo decir nada del orden cortazariano u otros). -Cierto sucesos extraños, hilarantes, interesantes. -La voluntad de experimentar en general. Lo malo: -No me atrapó y me tenía que obligar a mí mismo a leer hasta que desistí. -Si se conoce la filosofía, tanto occidental como oriental, no aparece nada original. Cortázar mismo dijo en una entrevista que él no era un pensador. Nota: 6,5