Tras la repentina muerte de Druso el Mayor, una oscura trama domina la familia imperial de Roma: Augusto parece indeciso sobre quién será su sucesor, mientras sus nietos naturales van falleciendo en circunstancias poco claras. Tiberio, exiliado en Rodas, es llamado para incorporarse como legado imperial en el frente de Germania. Tras ser privado por Segest del matrimonio con Thusnelda, Arminio, hijo del líder querusco Segimer Wulfalahaub (Cabeza de Lobo en idioma germánico), regresará a Germania después de una larga estancia en las legiones de Tiberio. Durante esta experiencia ha conseguido la ciudadanía romana y el rango de tribuno de caballería. Sin embargo, tras vivir los horrores de la conquista romana en Panonia, Arminio decide, contra toda lógica, cambiar el curso de la historia y enfrentarse a los ejércitos de Augusto en las selvas de Teutoburgo, después de urdir un ambicioso plan y de ser elegido frijadæmheldaz por los juramentados rebeldes de Germania occidental.