Podemos decir que esta obra se trata de una biografía novelada de los años que el autor vivió en Pekín (entre 1946 y 1950), presenciando el advenimiento del poder comunista. La vivió en primera persona, ya que estuvo casado con una aristócrata de Pekín y fue testigo directo de la caída de la antigua China. Esto es lo que narra la novela, haciendo hincapié en esa destrucción, esa aniquilación de la vieja cultura y de las costumbres milenarias chinas. Es una lectura que se disfruta, es muy interesante conocer curiosísimas anécdotas y costumbres chinas, además es una lectura fácil y amena. Los personajes son muy entrañables. Narrada desde el amor y un profundísimo respeto hacia China, es una lectura muy recomendable.
hace 7 años